En medio de presiones transversales que piden la salida de la embajadora de Chile en Nueva Zelanda, Manahi Pakarati, la Cancillería confirmó este martes que se encuentra evaluando las declaraciones realizadas por la representante de Chile, debido a sus dichos con mensajes alusivos a la libre determinación de Rapa Nui.
Desde el Ejecutivo se informó que la diplomática ya fue reprendida por la Cancillería tras la publicación difundida en redes sociales, la que posteriormente fue eliminada. No obstante, se aclaró que, por ahora, la embajadora sigue contando con la confianza del Ejecutivo, pese a que no sería la primera vez que se refiere públicamente a esta temática.
Sin embargo, en declaraciones entregadas por el ministro de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren, se señaló que también se está revisando una entrevista concedida en septiembre, de la cual el ministerio tomó conocimiento de manera tardía. El objetivo de esta revisión es verificar si se cumplieron o no los protocolos vigentes que regulan las declaraciones públicas de los embajadores y embajadoras de Chile.
"Ya se le hizo presente el error que cometió y que ella lamentó de postear un mensaje absolutamente inapropiado. Por otra parte, hemos tomado conocimiento bastante tardío de la entrevista que dio en septiembre, y queremos verificar si se cumplieron o no los protocolos vigentes, justamente para todo lo que son los dichos de nuestros embajadores", reconoció.
En este contexto, recalcó que "todos los embajadores, todas las embajadoras dependen de la confianza del Presidente de la República de acuerdo a nuestro ordenamiento Constitucional. Y creemos que es muy importante que todos y todas, justamente mantengan todo lo que son nuestros principios y nuestras políticas en esa materia".
"Las expresiones de la embajadora Pakarati respecto a situaciones internas que pueden vincularse con la relación entre el pueblo originario y digamos y nuestro sistema político. Nosotros entendemos que son expresiones a título personal y no reflejan necesariamente lo que es la posición del Gobierno y de la Cancillería", afirmó el canciller.
“Nosotros no tenemos constancia de esa solicitud de permiso para dar la entrevista, pero hay que ver también el contexto, las circunstancias en las cuales se produjo esa entrevista y eso requiere de un análisis mayor que nosotros estamos efectuando”, explicó.
Consultado sobre la posibilidad de pedirle la renuncia, el ministro dijo que “no quiero adelantar ninguna conclusión al respecto. Obviamente, al hacer una investigación, todas las opciones están abiertas”.
