Uno de los casos policiales que más generó conmoción en Dinamarca fue el de la enfermera Christina Hansen, a quien se le condenó por matar a pacientes al administrales dosis letales de diazepam y morfina.
Los hechos ocurrieron entre 2012 y 2015 en el Hospital Nykøbing Falster, donde Hansen era considerada como la mejor profesional por sus colegas.
Sin embargo, tras estudiar su comportamiento, la mujer fue descubierta por otra enfermera, quien denunció a la policía en marzo de 2015.
Luego de ser procesada, Hansen finalmente fue condenada a 12 años de cárcel y actualmente se encuentra privada de libertad. A sus 38 años, continúa declarándose inocente.
Trastorno histriónico de la personalidad
La condenada —a quien además se le retiró su cargo de enfermera— se le había sentenciado a cadena perpetua por tres cargos de asesinato y un intento de homicidio, pero posteriormente se determinó que pudo haber “envenenado accidentalmente a los pacientes en su suspiro para aliviarles el dolor”.
Una psiquiatra forense concluyó que Hansen tenía un trastorno histriónico de la personalidad, que conlleva superficialidad, egoísmo y búsqueda constante de emoción.
El caso real fue detallado en el libro “The Nurse: Inside Denmark’s Most Sensational Criminal Trial”, de Kristian Corfixe, y además inspiró la serie de Netflix titulada "La enfermera".