Este domingo 12 de junio se conmemora el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, un problema social que vulnera los derechos humanos de millones de niñas, niños y adolescentes en el mundo.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) en el año 2002 instauró esta fecha con el fin de generar conciencia en la población y en las autoridades sobre urgencia de abordar el tema.
De acuerdo a la Unicef, los avances para erradicar el trabajo infantil se han estancado por primera vez desde hace 20 años a raíz de la pandemia. Además, según sus datos, 160 millones de niñas, niños y adolescentes, de entre 5 y 17 años, trabajan.
La entidad estima que para finales de 2022 cerca de nueve millones de menores de edad podrían terminar trabajando a causa de la crisis sanitaria y esa cifra podría aumentar a 46 millones si no se adoptan las medidas necesarias.
"Trabajo infantil no es cualquier tarea realizada por un niño. Son labores que exigen muchas horas de dedicación, para las que son demasiado jóvenes, que ponen en riesgo su salud y bienestar, que les roban tiempo de juego y que les apartan de la educación", concluye la organización.