Dilber era madre y tenía 28 años, una joven mujer que deseaba un cambio en su cuerpo, pero tras realizarse el procedimiento tuvo una mala reacción y falleció.
La mujer oriunda de Viena, Austria, desembolsó 180 euros, es decir, más de 170 mil pesos chilenos, para rellenar sus labios. Luego de la atención estética con médicos, horas más tarde comenzó a presentar intensos dolores de cabeza.
Los síntomas fueron tan fuertes que el esposo de Dilber, Murat, la llevó directamente hasta el hospital. Según la versión del hombre, a pesar de la notoria inflamación de sus ganglios linfáticos, la atención fue denegada por los mismos médicos, quienes la enviaron nuevamente a su hogar.
Una vez de regreso en la casa, no pasó mucho para que todo empeorara, por lo que regresó y finalmente, el 13 de octubre fue ingresada a centro de salud.
Sin embargo, el 14 del mismo mes, Dilber falleció tras sufrir una insuficiencia cardíaca.
"¡Ahora la pequeña tiene que crecer sin su madre [y] me quitaron la vida!", comentó el esposo de la víctima para The Sun.
Actualmente, la familia de esta madre se encuentra en una lucha legal, donde acusan a las médicos de negligencia. Por su parte, desde el centro hospitalario rechazó las acusaciones diciendo, "El paciente murió durante la terapia en curso. No pudimos hacer nada por ella”.