Una familia denunció la trágica muerte de su perrito de raza pekinés, quien sufrió un paro cardiorrespiratorio al ser obligado a viajar en la maleta de un bus interprovincial que se desplazaba de Venezuela a Colombia.
Según el relato de Gabriela Nava, la dueña de la mascota fallecida, el incidente ocurrió durante unas vacaciones a Venezuela: "Viajamos de Medellín a Maicao. Al momento de comprar los pasajes preguntamos que si podíamos viajar con la mascota, sobre lo cual nos dicen que sí. Que tenía que tener en regla todas sus vacunas y firmar un papel que me dieron, que decía que Maxi podía viajar con nosotros arriba. Tenían unas ciertas medidas y él entraba en eso para viajar con nosotros. Viajamos superbién con él desde acá de Medellín a Maicao", relató a Noticias Caracol.
El problema fue al regreso, cuando el chofer del bus de la empresa Copetran se negó a que el perro viajara junto a sus dueños en el sector de los pasajeros. Por más que Gabriela le intentó explicar que tenían toda la documentación necesaria, el conductor se negó.
Finalmente, la familia decidió dejarlo en su canil en el maletero y supervisarlo en las paradas que el vehículo hiciera, pues era un viaje de 19 horas.
La primera parada fue a las dos horas de viaje, donde el esposo de Gabriela fue a darle agua. En ese momento lo vio bien.
"Alrededor de otras dos horas y media, el bus hace otra parada para recoger una encomienda. Me imagino que cuando abren ya el perrito estaba mal, estaba agonizando (...). En eso una pasajera se asoma y dice que quiénes son los dueños del perrito, que se estaba muriendo. Nos levantamos y empezamos a tocar la puerta para que nos abrieran. Al bajarnos del bus lo vemos todo mal, no respondía, no hacía nada", relató la mujer.
Al trasladarlo a una veterinaria se confirmó el fallecimiento del pekinés: "El papel decía paro cardiorrespiratorio. Le dio como un choque de calor o algo así", recordó la dueña de la mascota.
Tras el incidente, la empresa "nos dicen que nos van a pagar lo que costó Maxi para que nosotros no hiciéramos denuncia y no habláramos nada de lo que pasó. Recibimos ese dinero y con eso le dimos su despedida digna, su cremación".
Sin embargo, la dueña de Maxi dice que jamás se les dio una explicación de lo sucedido, mientras que la empresa lamenta el hecho y asegura que nunca recibieron un reclamo formal por parte de la familia afectada.
Ver Video
