¿Qué hacemos con este calor?
Cuando se anuncia una ola de calor, las ciudades (y sus habitantes) son quienes sufren las consecuencias más evidentes. Más allá de la incomodidad que causa el calor extremo, la presencia de estos fenómenos climáticos tiene efectos devastadores tanto para la calidad de vida como para la salud de quienes viven en ellas.