El dólar en Chile cerró la jornada de este lunes en torno a los $909,88, registrando una leve baja de $0,12 (-0,01%). Tras una apertura más débil, el tipo de cambio logró estabilizarse durante la sesión, en una jornada marcada por baja liquidez propia de la semana de Navidad, lo que limitó la transmisión completa de los factores externos.
El movimiento se dio pese a un cobre que subió 0,32% hasta US$5,50 la libra tras la apertura de Wall Street, manteniéndose cerca de máximos de cinco meses. El metal continúa respaldado por una oferta estructuralmente ajustada, con interrupciones en minas, escasa entrada de nuevos proyectos y cargos de tratamiento y refinación históricamente bajos. En este contexto, el acuerdo entre Antofagasta Minerals y una fundición china con cargos de procesamiento en cero para 2026 refuerza el sesgo alcista del cobre.
A nivel externo, el Dollar Index cayó 0,48% hasta 97,85, acercándose a mínimos de octubre, ante expectativas de que la Reserva Federal continúe relajando su política monetaria. El mercado descuenta dos recortes de tasas en 2026, apoyado por señales de inflación más moderada y por llamados del presidente de EE.UU., Donald Trump, a reducir los costos de financiamiento. No obstante, la Fed mantiene un discurso dividido: mientras la presidenta de la Fed de Cleveland, Beth Hammack, aboga por una pausa tras los 75 pb ya recortados, el gobernador Miran sostiene que aún hay espacio para mayor estímulo.
La debilidad del dólar también se vio reforzada por el avance de los metales preciosos, impulsados por demanda de refugio ante tensiones geopolíticas entre EE.UU. y Venezuela, y por la fortaleza del yen tras el alza de tasas del Banco de Japón.
Con un dólar global debilitado y un cobre sólido, el tipo de cambio local podría moverse entre $900 y $915en el corto plazo, con un sesgo levemente bajista.
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