Pese a que la Ley de Pago a 30 días ya completa 6 años en vigencia, el comportamiento de pago de algunas de las industrias motor del país está al debe. De acuerdo al último informe “Cómo está la Cosa” de CobranzaOnline, Sheriff y Duemint sobre comportamientos de pago entre empresas, el comercio lidera la morosidad concentrando el 28,3% de las facturas con mora prolongada. La construcción es el segundo sector más afectado con 12,1% de las facturas morosas. Le siguen de cerca transporte y la industria manufacturera.
Entender esto es clave para reducir la exposición a riesgos y adoptar estrategias específicas de cobranza según el sector con el que se opera, señala Belén Sanguinetti, confundadora de CobranzaOnline.
¿Qué probabilidad de pago exhiben las industrias más morosas?
Belén Sanguinetti, confundadora de CobranzaOnline, explica que comercio y construcción no son solo las industrias más morosas, sino que también las que concentraron el mayor porcentaje de quiebras durante 2024 (23,8% y 19,7% respectivamente) y las que exhiben las tasas de recupero más bajas de la industria (35% y 44% respectivamente), convirtiéndolas en los sectores con la peor probabilidad de pago frente a acciones de cobro extrajudicial.
Por otro lado, el informe revela que los sectores con mayor concentración de deuda morosa suelen compartir características estructurales que los hacen más propensos al impago. El comercio, por ejemplo, mantiene una alta rotación de inventario, y los plazos extendidos de pago con proveedores pueden generar desajustes de liquidez, afectando la capacidad de cumplir con sus obligaciones a tiempo. “En construcción, la dependencia de proyectos a largo plazo, los ciclos de pago irregulares, las trabas para nuevas inversiones y los problemas de financiamiento aumentan el riesgo de morosidad”, señala Sanguinetti.
La morosidad por tamaño de empresa: las micro y pequeñas empresas son las más afectadas
Otra de las tendencias que revela el reporte es que la morosidad impacta de manera diferenciada a las empresas, dependiendo de su tamaño y capacidad financiera. Las micro y pequeñas empresas, por ejemplo, concentraron el 71% de las facturas morosas durante 2024, pero solo el 40% del monto adeudado.
Las grandes empresas, en cambio, deben 9 veces más por factura morosas que las microempresas, concentrando la deuda.