Cerca de las 23:30 horas, un conductor en estado de ebriedad y sin licencia de conducir, colisionó el antejardín de una casa en Quilicura, rompiendo la reja. Además, la dueña de casa denuncia que casi es atropellada por el chofer, quien actualmente está detenido por manejar ebrio. Por su parte, el copiloto involucrado deberá responder a una infracción.
"Carabineros se enfrenta a la detención ciudadana de un conductor y su acompañante que en momentos antes había colisionado en la reja perimetral de un domicilio", detalló el capitán Ricardo Mendoza, oficial de Ronda de la Prefectura Santiago Norte.
"Se logró verificar que este conductor lo hacía en estado de ebriedad, a la prueba respiratoria que fue sometido marcó 1.8, por lo cual fue detenido por la conducción en estado de ebriedad y daños a la reja perimetral del inmueble, sin causar lesiones a algún ocupante de este domicilio", precisó el capitán.
Sobre las identidades de los involucrados, indicó que el chofer es ciudadano venezolano con situación migratoria irregular y que no posee licencia de conducir. En tanto, el acompañante es chileno. Ambos mayores de edad.
Miguel Cataldo, dueño de la propiedad afectada, relata cómo advirtieron la situación, cuando ya su familia se disponía a descansar. "Siento una frenada y un estruendo. Me asomo por la ventana y había a un auto incrustado en la reja de mi casa. Le empecé a gritar a los tipos que pararan, porque estaban haciendo más daño".
"Bajó mi señora primero y el tipo casi la atropella cuando salió arrancando", añadió.
Michell Darat ratifica el relato de su esposo. "Le pido que pare, porque estaba acelerando mucho intentando arrancarse (...) Cuando veo que se desincrustó de mi reja y se va a arrancar, trato de detenerlo y me pongo al frente del auto y él me tira el auto encima. Mi esposo me alcanzó a agarrar de la manga y tirar hacia atrás", recuerda.
Vecinos activaron las alarmas vecinales, que advirtieron a seguridad municipal. "Unos metros más allá quedaron detenidos y los vecinos los retuvieron. Estaban en estado de ebriedad, completamente borrados", explica Cataldo, quien enfrentó a los sujetos. "El que venía manejando era muy agresivo, insultaba a la gente, hacía gestos obscenos, sobre todo a las mujeres", agregó.