Continúan las indagatorias para establecer las eventuales responsabilidades detrás de la muerte de Franco Vargas, conscripto de 19 años que pertenecía a la Brigada Motorizada N° 24 "Huamachuco" de la VI División en la comuna de Putre, en la región de Arca y Parinacota.
Según el Servicio Médico Legal, el joven perdió la vida tras sufrir una insuficiencia cardíaca. Sin embargo, la madre y compañeros de la víctima manifiestan que su deceso fue consecuencia de la falta de auxilio y maltrato por parte de sus superiores del Ejército.
"Él se quejó en reiteradas ocasiones y decía que no podía seguir, que no quería continuar. Los suboficiales le decían que siguiera, que no podía quedarse ahí y que si se quedaba se moría, y ahí fue cuando un poco más adelante el paso de Franco nos adelanta y lo veo caer por última vez", relató a 24 Horas Francisco Asme, excompañero de brigada de Franco Vargas en el Ejército.
Vale recordar que el joven perdió la vida tras realizar una campaña a 4 mil metros de altura y bajo condiciones meteorológicas que no serían óptimas. Dicha caminata provocó además que otros 45 soldados debieran ser hospitalizados tras sufrir una infección respiratoria.
La versión entregada por los testigos de la emergencia establece que el fallecido conscripto pidió auxilio en reiteradas ocasiones y que incluso se desmayó al menos tres veces antes de perder totalmente el conocimiento y no despertar.
No obstante, la falta de ayuda no sería la única negligencia denunciada, pues los compañeros aseguran que a Franco "le hicieron la vida imposible" durante sus últimas semanas antes de morir.
"Era demasiado inteligente, era súper tranquilo y conocimos gente que le hizo la vida imposible a Franco en las últimas semanas", indicó el exsoldado Cristopher Pacarat.
A lo anterior se suman las distintas versiones sobre la muerte, pues desde el Ejército afirman que el joven llegó con signos vitales al Cesfam de Putre, mientras que desde el mismo recinto médico sostienen que ingresó ya sin vida.
"Venía trasladado por intermedio de un vehículo militar y se constata que este paciente no tenía signos vitales. Se siguieron realizando las maniobras de reanimación", señaló Aldo Rivera, director del Cesfam de Putre.
A raíz de todos los antecedentes y testimonios, el Ministerio de Defensa instruyó un sumario y una investigación para determinar las eventuales responsabilidades y la Contraloría General de la República ofició al Ejército para entregar todos los antecedentes en un plazo de 10 días.
En tanto, la madre de Franco, Romy Vargas, ingresó una querella contra la institución castrense.
"No me dieron explicación, no me quisieron dar la bitácora de actividades, nada hasta el día de hoy. Yo necesito que el general Iturriaga me atienda y me dé un explicación por último para pedirme perdón y que me asegure que las personas que no auxiliaron a mi hijo y que lo dejaron morir paguen", aseveró.