Un amplio rechazo transversal generó en el Congreso una publicación realizada por la embajadora de Chile en Nueva Zelanda, Manahi Pakarati, luego de que compartiera en redes sociales un mensaje alusivo a la autodeterminación de Rapa Nui, situación que abrió cuestionamientos políticos y derivó en anuncios de eventuales acciones desde la Cámara de Diputadas y Diputados.
La controversia se originó tras la difusión de una historia en la que se observa un cartel con la frase "libre determinación para la nación Rapa Nui", acompañado del texto escrito por la propia embajadora: "self-determination for Rapa Nui". El hecho provocó críticas inmediatas al interior de la Comisión de Relaciones Exteriores.
Desde la UDI, el diputado Christian Moreira calificó el posteo como “una publicación inaceptable y una demostración más de los gustitos que se dio el Presidente Boric al nombrar a sus amigos y personas con poca experiencia en política internacional en embajadas de todo el mundo, como lo fue el Reino Unido, en España y ahora ésta publicación de la representante chilena en Nueva Zelanda”. En esa línea, agregó que “a la embajadora parece que se le olvidó que Chile es un país unitario e indivisible, tal como lo establece nuestra Constitución Política, y que el octubrismo intentó modificar en los fallidos procesos constituyentes”.
Por lo mismo, el parlamentario anunció que “citaremos al canciller Alberto van Klaveren para que dé explicaciones en la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara y conocer qué medidas se adoptaron con respecto a la embajadora, que al parecer se representa sola y no al Estado de Chile”.
Desde el PPD, el diputado Raúl Soto también expresó reparos al actuar de la diplomática, señalando que le parece “totalmente inadecuado” lo ocurrido, ya que “no corresponde que una diplomática esté realizando o compartiendo opiniones políticas tan disruptivas, ni siquiera a título personal”. En ese sentido, enfatizó que “ella tiene un cargo donde representa al país, por lo tanto, no compartimos este tipo de actos”.
Las críticas también fueron respaldadas desde el Partido Republicano. El diputado Stephan Schubert sostuvo que “es absolutamente inaceptable lo que ha señalado la embajadora, que lo que hace es impulsar el separatismo dentro de nuestro estado unitario”. A su juicio, “eso es extremadamente grave y también es extremadamente grave que luego de haberse constatado aquella grave situación, la Cancillería no le haya removido su cargo, sino que simplemente ha señalado que se le ha amonestado”.
En la misma línea, agregó que “lo que procede y lo que corresponde es que ella sea removida del cargo. Es ese, precisamente, uno de los cargos de confianza del Presidente de la República. Es amiga del Presidente de la República y por esa razón ella está en esa posición. Y dado que lo que ella ha hecho es fomentar y pretender el separatismo de nuestra República, esa situación amerita a lo menos la salida del cargo”. Además, remarcó que “vamos a analizar y a estudiar si esto además justifica una acción legal, pero por lo pronto lo que corresponde es que Cancillería la remueva del cargo a la brevedad”.
Por su parte, la diputada Catalina del Real, también del Partido Republicano, calificó lo ocurrido como “gravísimo, improcedente e inaceptable que una embajadora chilena haga activismo político en contra de los intereses del Estado de Chile. El presidente Boric debe tomar cartas en el asunto y destituirla de su cargo”.
Una postura distinta expresó el diputado Félix González (PEV), quien llamó a matizar el debate. Afirmó que “sería una gran contradicción ser embajadora de Chile y hablar de separatismo del pueblo Rapa Nui. Yo espero que ella no se refiera a eso. No he tenido la oportunidad de escuchar de primera fuente qué es exactamente lo que ella dijo, pero la autodeterminación tiene distintas escalas”. Agregó que “las comunidades, como la comunidad Rapa Nui, como pasa también con otros pueblos que hay en América Latina, tiene el todo el derecho de hacer sus planteamientos y creo que nadie debe ofenderse”, aunque reconoció que “el hecho de que ella sea embajadora la condiciona a representar al Gobierno, representar al Estado de Chile y tal vez no pueda darse este tipo de gustos”.
Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores, en tanto, confirmaron que se actuó una vez conocido el hecho. Según consignó La Tercera, desde Cancillería señalaron que “el 24 de diciembre se tomó conocimiento de la foto publicada, ese mismo día fue reprendida. Ella se excusó, reconoció el error y sacó la foto de las redes sociales”.
