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"Me contó que le había disparado a Carabineros": funcionaria judicial acusada de encubrir crimen de carabinero

Marcela García habría escondido a su pareja, Juan González, para evitar su detención por el asesinato del suboficial David Florido.

24horas.cl

Miércoles 22 de junio de 2022

El pasado viernes 10 de junio, el suboficial mayor David Florido Cisterna fue asesinado tras ser baleado por un sujeto a las afueras de una barbería en medio de un operativo en Pedro Aguirre Cerda, región Metropolitana, crimen por el cual hay tres detenidos.

En concreto, tras varios días de intensa búsqueda, la policía uniformada logró dar con el paradero de Juan González, quien es sindicado por el Ministerio Público como el autor del disparo que terminó con la vida del funcionario, y que además, habría contado con la ayuda de su pareja, Marcela García, una funcionaria del Poder Judicial. 

La propia mujer reveló que González "me contó que él le había disparado a Carabineros".

Relación breve

Según La Tercera, la mujer, que presta servicios al Octavo Juzgado de Garantía de Santiago, reveló al OS-9 de Carabineros que el imputado por el homicidio del carabinero "fue mi pololo durante un mes y tres semanas".

Respecto al cómo se conocieron, García contó que fue al exterior del Centro de Justicia, donde Juan se estacionó con un vehículo de gama alta, pidiéndole su número de teléfono. Tras ello, concretaron su primera cita en el Mall Plaza Oeste. 

Toda esta situación se dio luego de que González abandonara la cárcel bajo el beneficio de libertad condicional en diciembre de 2021.

Día del crimen

García detalló que "esta persona (Juan González), el día 10 de junio de 2022, a las 21:00 horas aproximadamente, llegó a mi domicilio y me percaté que andaba cojeando por una herida que tenía en su pie izquierdo".

Según el testimonio al que habría accedido el citado medio, Juan le dijo que "le habían querido robar el auto y a raíz de un forcejeo, estos tipos le habían disparado en el pie".

La mujer también contó que se fueron a varias comunas del sector oriente, donde lo escuchó hablar por teléfono diciendo 'GATO 12', diciéndole que lo debía llevar hasta Conchalí por la mañana y que pasarían la noche en un motel en Colina.

Ya por la mañana del sábado 11 de junio, la funcionaria judicial cumplió con el mandato del sujeto, llevándolo hasta un lugar que afirmó 'no recordar con exactitud la calle', en la cual había un auto esperando al imputado.

Con el pasar de las horas González le reveló por WhatsApp que sus lesiones habían ocurrido en medio de un procedimiento policial mientras se cortaba el pelo.

"Había entrado al baño y al salir se encontró de frente con una paca con quien había forcejeado disparándole ella en el pie. Juan también me mencionó que había disparado junto a los otros sujetos que lo acompañaban. También me señala que no sabe que si de su arma salió el disparo con el cual murió el paco, porque todos habían disparado", relató la funcionaria judicial.

Ya para el lunes 13 de junio, cerca de las 23:00 horas la mujer recibió una serie de videollamadas de un número desconocido, las cuales no contestó. No obstante a ello, si recibió un mensaje de Juan donde decía que "que me amaba y que no me iba a olvidar y que me había ganado todo su respeto y lealtad y que me iba amar por el resto de su vida".

Según los primeros antecedentes de la Fiscalía, González buscaba poder salir del país, y, en su trayecto, fue interceptado por personal policial.

Detención y formalización

No fue hasta el viernes 17 de junio que Carabineros concretó la detención de tres personas por el asesinato del Suboficial Mayor, David Florido,  identificados como Juan González Quezada, como presunto autor material del crimen; Julio Vidal y Marcela García, sindicados como encubridores del principal acusado.

Este lunes 19 de junio se llevó a cabo la audiencia de formalización en contra de los tres imputados, quedando todos con la medida cautelar de prisión preventiva por un plazo de 120 días, mientras se desarrolla la investigación.

Cabe mencionar que González Quezada había sido condenado a ocho años de cárcel previamente, pero que desde diciembre de 2021 se mantenía con libertad condicional. En caso de ser declarado culpable, el imputado podría sumar otros 40 años de presidio.

Por su parte, Vidal y García arriesgan desde cinco años y un día por haber ocultado al sospechoso del crimen del funcionario de Carabineros.