En el marco de su gira por Europa, el Presidente Gabriel Boric hizo un llamado de atención a la oposición y reconoció que su Gobierno vive "un momento difícil" a raíz del Caso Convenios.
En entrevista con BBC Mundo, el Mandatario abordó la crisis política y de desconfianza que generó el presunto traspaso de fondos públicos a fundaciones, aseverando que para su administración ha sido "un momento complejo, sin lugar a dudas".
Frente a ello, inisitió en que el Ejecutivo aportará con todos los antecedentes para determinar si hubo responsabilidades y delitos en el Caso Convenios, y aseguró que nadie será protegido.
En ese sentido, reiteró que su instrucción a todo el gobierno ha sido que "acá se tiene que saber absolutamente todo, no se protege a nadie, independiente de la cercanía al partido que tenga".
Bajo ese contexto, el Presidente se refirió a cómo continuará el Ejecutivo con su "promesa" de probidad tras los duros cuestionamientos a su gestión y la de varios de sus ministros a raíz del Caso Convenios.
"Nuestro compromiso es que frente a casos como estos vamos a reaccionar de manera distinta a como se ha hecho antes. Y creo que ya lo hemos hecho. No se ha defendido a nadie, se ha dicho que esto es grave y por lo tanto tiene que investigarse, poner todos los antecedentes que tenemos a disposición de los organismos correspondientes, independientes del gobierno, tanto de la Fiscalía como de la Contraloría", aseveró.
Frente a este tema, Boric fue enfático en señalar que "no vamos a hacer ningún tipo de compadrazgo ni perdonazo ni intento de blanquear la situación".
Llamado de atención a la oposición
El Mandatario también fue consultado por el rol que ha tomado la oposición frente a las diversas propuestas y reformas que han sido rechazadas durante su período.
Al respecto, expresó "preocupación", no obstante, aseguró que "en las últimas semanas ha habido buenas señales en materia, por ejemplo, previsional". Pese a ello, el Presidente manifestó "entender" el rol fiscalizador y de "contrapeso" de la oposición.
"Yo entiendo que en ese rol se cometan excesos discursivos. Yo fui parte de la oposición en el gobierno anterior y entiendo cómo funciona eso", sostuvo.
Sin embargo, reprochó que "el oponerse a absolutamente todo y tratar de desestabilizar al gobierno de manera permanente, como ha sido la tónica en el último tiempo, no contribuye a la solución de los problemas. Y esos problemas van a seguir existiendo, independiente de quien gobierne".
"Por lo tanto, lo que les pido es que tengamos todos altura de miras para tratar de solucionarlos en conjunto y no sencillamente patearlos para adelante", fue su llamado.
Finalmente, Boric fue consultado por su posición en caso de que José Antonio Kast sea el p´roximo presidente de Chile.
"A mí me preocupa la continuidad de las instituciones democráticas y el bienestar del pueblo de Chile. Y, en ese sentido, creo que las propuestas de la ultraderecha en nuestro país no son buenas para los chilenos y, por lo tanto, espero que logremos generar una continuidad", indicó.
"Quedan 2 años y medio, y yo confío en que el fruto del trabajo que hemos estado llevando adelante va a convencer a la gente que esta ha sido una buena alternativa", añadió.
De todas maneras, el mandatario aseguró que respetará la "voluntad democrática del pueblo" en caso de no lograr entregar la banda presidencial a alguien de su sector.