Durante la pandemia, la necesidad de evitar grandes afluencias de público se trasladó al mundo del empleo, instalando el teletrabajo como una forma efectiva de lidiar con esto, llegando a del 22,1% de toda la oferta en 2021 según la Encuesta Nacional de Empleo.
Con el pasar de los meses, la disminución de casos y el avance de la vacunación, esta medida pasó de ser algo recurrente a una modalidad optativa que, al parecer, llegó para quedarse.
Así lo reveló una nueva encuesta de Trabajando.com, donde el 25% dijo que le acomoda más hacer teletrabajo, mientras que un 35% se inclinó con una modalidad híbridad cuando estos decidan cuando ir a la oficina, y un 30% también de forma híbrida, pero con días establecidos.
Por otro lado, solo un 10% se mostró a favor del volver completamente de manera presencial a su lugar de trabajo.
Incluso, el 41% de los teletrabajadores consideraría cambiarse de empleo si tuviera que volver al formato presencial de manera parcial o permanente, mientras que un 10% dijo no estaría dispuesto a retomar funciones en sus oficinas y que simplemente renunciaría.
TELETRABAJO A LA BAJA
No obstante a lo anterior, en la última entrega de la Encuesta Nacional de Empleo, correspondiente al trimestre móvil de junio y agosto de 2022, los trabajadores asalariados que realizaban labores remotas llegaron a solo el 4,8%.
Al respecto, Juan Bravo, director del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales, dijo a LUN que "la mayoría de los trabajadores que en algún minuto hicieron teletrabajo, finamente ha n vuelto a la presencialidad".
"A mi juicio una de las razones fundamentales es que no necesariamente el teletrabajo es una modalidad más productiva y eficiente que el trabajo presencial. Suele ocurrir que hay tareas que son factibles hacer a distancia, pero que son ineficientes. En el rubro de la enseñanza, por ejemplo, en el peor momento de la pandemia tuvo la mayor prevalencia el teletrabajo y hoy es casi inexistente en ese rubro", explicó el experto al citado medio.