Gabriel Cavada, epidemiológico y bioestadístico de Clínica Alemana, advirtió que debido a cómo ha evolucionado el coronavirus COVID-19 en Chile, el sistema de salud podría colapsar "en un par de semanas", remarcando el llamado al autocuidado de la población para que tome las medidas necesarias.
En entrevista con 24 AM, el experto sostuvo que los análisis de las últimas jornadas revelan que "tuvimos esta explosión de casos al punto de que la velocidad de la epidemia es de un 60% por día".
"De aquí a un par de semanas, el sistema de salud estará colapsado así como está la situación", añadió.
Cavada también afirmó que durante el avance de la emergencia hubo "ciertos hitos comunicacionales que trajeron el relajo de las medidas de cuidado", refiriéndose al "concepto de meseta".
"La única forma que tenemos es la responsabilidad ciudadana, de quedarse en la casa y lavarse las manos", complementó.
El médico enfatizó en la necesidad de seguir cuidándose porque "los doctores actualmente solo pueden ayudar a respirar, pues no tenemos medicamentos probados".
Finalmente, explicó que la cuarentena total decretada en 38 comunas de la región Metropolitana debiese ir actualizándose cada siete días para ver cómo evolucionan los casos.
MAÑALICH: LA FALTA DE CONFIANZA RECÍPROCA NOS JUGÓ UNA MALA PASADA CONTRA LA PANDEMIA"
Tras el decreto de cuarentena total en 38 comunas de la región Metropolitana, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, enfatizó la necesidad de cumplir con las medidas tomadas, pero remarcó que "la falta de confianza recíproca nos jugó una mala pasada contra esta pandemia".
Según informó la autoridad a La Tercera, durante la emergencia no han logrado “encontrar un mecanismo de diálogo con la ciudadanía, transparente y de buena fe”.
Por lo mismo, aseveró que "decirle a la gente que confíe en lo que el Estado le dice como conducta correcta es muy difícil. Ese trasfondo de falta de confianza recíproca nos jugó una mala pasada en la lucha contra esta pandemia".
“Si no logramos efectivamente que haya un entendimiento de lo que está en juego, y seguimos confiando en que va a haber un militar en cada esquina, o que vamos a seguir reduciendo los permisos de la comisaría virtual -cosa que va a ocurrir- estamos descansando en un pilar que es frágil, muy débil”, agregó.
"ME ANGUSTIA Y ME PREOCUPA"
El ministro de Salud también se manifestó muy preocupado por la capacidad de respuesta que tenga el sistema de salud ante la acelerada escalada que han sufrido lo contagios en la región Metropolitana.
"Estoy intensamente preocupado, porque hemos diseñado un adelantamiento de la respuesta que creí que iba a ser más necesaria hacia el mes de junio. La hemos tenido que adelantar a mayo. Las medidas extremas, que son durísimas, tienen que lograr un objetivo, y ese es que el número de contagios diarios baje, a como dé lugar, a menos de 2 mil. Me angustia y me preocupa que saltamos rápidamente de 300 a una media de 700, y de ahí a un promedio de 1.400", enfatizó.
Debido a la razón de por qué se produjo este aumento, la autoridad precisó que "la conducta de las personas, una vez que había un levantamiento de las restricciones en la RM, no fue la deseable. Se produjo una liberación en términos de hacer fiestas en departamentos, clandestinas, que significaron un potencial de riesgo enorme, y eso me llevó a mí, antes de que empezaran los casos, a hacer una declaración de guerra en el sentido de que todo se jugaba en la batalla por Santiago, hasta que los números lo avalaron y llegamos a las acciones en que estamos hoy día".