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Senado aprobó proyecto que capitaliza el Fogape para dar créditos blandos

A través del proyecto, los bancos que tengan acceso al financiamiento del Banco Central, podrán otorgar créditos para capital de trabajo por hasta US$24.000 millones. La medida regirá hasta abril de 2021.

Agencia Aton

Miércoles 31 de diciembre de 1969

El Senado aprobó por 42 votos a favor y 1 abstención el proyecto que capitalizará el Fondo de Garantía para el Pequeño Empresario (Fogape) en US$ 3.000 millones para otorgar créditos a las las pequeñas y medianas empresas, afectadas por la pandemia del COVID-19. La iniciativa quedó en condiciones de cumplir su segundo trámite en la Cámara de Diputados.

A través del proyecto, los bancos que tengan acceso al financiamiento del Banco Central, podrán otorgar créditos para capital de trabajo por hasta US$24.000 millones. La medida regirá hasta abril de 2021.

De este modo, se flexibilizan los requisitos para acceder a estas líneas de créditos que tendrán por ley una tasa que no superará la tasa de política monetaria (TPM) del Banco Central de 0,5% más 3%, es decir que bajo las actuales condiciones la tasa nominal no superaría el 3,5%.

Podrán postular empresas con ventas netas anuales de hasta 1 millón de UF (casi $30 mil millones), y los exportadores. Esto significa que podrán postular prácticamente el 99,8% de todas las empresas del país que otorgan el 84% del empleo formal. Esta línea tendrá 6 meses de gracia y será pagadera en cuotas durante un período que irá entre 24 y 48 meses.

Durante el debate hubo amplia coincidencia en valorar este segundo paquete de medidas y ayudas a las pymes, uno de los más significativos de las últimas décadas, y que apunta a uno de los temas críticos: entregar recursos frescos a las empresas que son las que generan más del 80% del empleo en el país, para que puedan sostener sus operaciones durante los próximos 2 o 3 meses, los más duros de la pandemia.

Al respecto, el ministro de Hacienda, Ignacio Briones recalcó su esperanza de que este proyecto esté despachado a la brevedad puesto que “las empresas necesitan estos recursos desde hace semanas”, aludiendo así a la compleja situación que atraviesan las empresas no solo con la crisis sanitaria, sino que arrastran vulnerabilidades desde octubre pasado, con el denominado estallido social.