Este martes, Arturo Vidal protagonizó su tercer gran acto de indisciplina en su historia por la Roja al chocar con su Ferrari, estando en estado de ebriedad.
Ya resuelto que el jugador quedó en libertad y que Jorge Sampaoli optó por mantenerlo en el plantel que disputa la Copa América, pero aún hay vueltas que darle a lo sucedido.
Una de ellas es la llamativa casualidad que pone a Bolivia como el "factor común" en las indisciplinas que el volante de Juventus ha protagonizado estando con el cuadro nacional.
La primera fue en el año 2008, cuando Vidal no quiso asistir al torneo "Esperanzas de Toulon", ya que no se trataba de un certamen correspondiente a Fecha FIFA y él prefería no asistir para descansar y disfrutar de vacaciones junto a su familia.
Ante esto, Marcelo Bielsa lo marginó de los siguientes duelos por las Clasificatorias de la Selección mayor, los que fueron disputados -con victorias nacionales- ante Bolivia y Venezuela.
El segundo gran hecho de indisciplina de Vidal en la Roja fue el denominado "Bautizazo" de 2011, donde tanto él como Jorge Valdivia, Jean Beausejour, Carlos Carmona y Gonzalo Jara, fueron marginados de la Roja y sancionados con al menos diez partidos de suspensión.
El volante nacional hizo su regreso al combinado nacional siete meses después, en un encuentro por Clasificatorias donde marcó y que fue, precisamente, ante Bolivia.
Ahora, tras lo ocurrido este martes, Vidal tendrá la oportunidad de redimirse en la cancha en plena competencia de la Copa América, cuando la Roja enfrente este viernes en el Estadio Nacional, precisamente ante el conjunto altiplánico.
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