En el partido entre Bolivia y Ecuador se produjo una particular jugada que comenzó con un dudoso cobro penal a favor del Tri.
El encargado de ejecutarlo fue Valencia, quien en la primera oportunidad anotó, pero el árbitro pidió retirarlo por una supuesta invasión al área.
¿Qué pasó después? El delantero ecuatoriano volvió a ejecutarlo, pero esta vez el portero boliviano logró atraparlo, pero...se lesionó.
Para fortuna de la selección boliviana, luego de la atención médica, el arquero Romel Quiñonez pudo continuar.