Sin duda una de las imágenes más recordadas del Mundial de Alemania 2006 fue el cabezazo que propinó Zinedine Zidane a Marco Materazzi en la final del torneo que ganó Italia sobre Francia.
Diez años después de aquel episodio el zaguero italiano rompió el silencio y en diálogo con el medio deportivo L´Equipe se refirió al hecho, desmintiendo las versiones que indicaban que se había referido de mala forma a la madre de Zidane.
"Decidí publicar un libro sobre ese acontecimiento porque todo el mundo me preguntaba lo que le había dicho (a Zidane) para que reaccionara así", explicó Materazzi.
"Le dije unas palabras estúpidas que no podían provocar tal reacción. En cualquier campo de Roma, Nápoles, Milán o París se escuchan cosas bastante peores", afirmó.
"Hablé de su hermana, pero no de su madre como leí en algunos diarios. Mi madre murió cuando yo tenía 15 años, por lo que nunca caería tan bajo de insultar a su madre", agregó.
"Me crucé muchas veces con aficionados que me paraban para decirme que había hecho muy bien en darle un cabezazo. Entonces me enfadaba, porque lo había recibido yo, lo que demuestra que la historia fue contada de forma extraña", concluyó.
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