Mauricio Molina protagonizó la situación más dramática vivida en el fútbol de Corea del Sur en el último tiempo.
Comenzado el partido entre su equipo, el FC Seúl, y el Busan IPark, el colombiano fue a buscar un balón aéreo al área, en una jugada que tuvo un impactante desenlace.
"Mao" recibió un fuerte puñetazo en su cara por parte del portero y, como si esto fuera poco, el defensa lo cabeceó, por lo que cayó inconsciente al suelo.
Al verlo sin reacción, sus compañeros se asustaron y trataron de reanimarlo lo más rápido posible, temiendo lo peor.
Su esposa, que estaba en las tribunas, estaba evidentemente angustiada, lo que hacía aún más dramática la situación, pero afortunadamente todo tuvo un desenlace feliz.
Luego de unos minutos y el trabajo de los médicos, Molina recuperó la consciencia e, incluso, se retiró de la cancha caminando, dejando todo en un fuerte susto.