José Martínez recordará el 23 de abril de 2015 como el peor día de su carrera deportiva.

Este portero de 31 años pretendía dar la sorpresa en la Copa Argentina junto a su equipo, San Martín de Tucumán, ante Argentinos Juniors, y lo logró, aunque de manera negativa y por partida doble.

Iban solo 12 minutos del primer tiempo cuando Martínez quiso intentar despejar un balón con el pie, pero no lo logró levantar y así comenzaron todos los problemas.

La pelota dio en un compañero y esto lo aprovechó el delantero rival Lautaro Rinaldi, quien puso el 1-0 para Argentinos con el arco vacío.

Pero las cosas no acabaron allí, ya que a los 30 minutos de la primera mitad, San Martín de Tucumán ya estaba perdiendo 2-0 y, nuevamente, gracias a su portero.

Esta vez su fallo fue aún más grosero, ya que, mientras se encontraba -insólitamente- viendo hacia la tribuna, el delantero rival, Gonzalo Castillejos, aprovechó su desatención.

El atacante remató rápido y, cuando Martínez se dio vuelta y quiso enmendar lo ocurrido, ya era demasiado tarde.

La brega terminó con Argentinos ganando por 3-0 y avanzando a la siguiente ronda, en una actuación que el portero intentará olvidar lo antes posible.