El mercado de fichajes está por cerrar y las especulaciones no dejan de tomar fuerza.
La vedette del mercado es Gareth Bale, quien se transformaría de forma inminente en jugador del Real Madrid y, de paso, en el fichaje más caro de la historia. Los "merengues" pagarían 99 millones de euros para quedarse con la carta del jugador, según informa la prensa local.
Para lograr la transacción, el club blanco vendería a Karim Benzemá, Mesut Özil y Ángel di María como medio para costear las llegadas del galés y del uruguayo Luis Suárez, según publica el diario Daily Mirror en su edición de día martes.
Un caso emblemático que se vive en este inicio de temporada es lo que ocurre con Iker Casillas. El portero no ha sido considerado bajo los tres postes del Real Madrid, siendo relegado al banco de suplentes.
Carlo Ancelotti ha continuado así con la decisión de José Mourinho de alinear a Diego López, situación que tiene molesto al arquero, sobre todo porque al final de esta temporada se juega el Mundial de Brasil 2014 y el capitán de la Selección Española teme que su participación esté en duda si no suma minutos. Por esta razón, la prensa hispana especula que si el jugador desea emigrar del Santiago Bernabéu y habría más que un interesado en quedarse con su carta.
En este horizonte destacan muchos equipos, que se han respaldado por las abultadas billeteras de jeques árabes, como el Paris Saint Germain, el Mónaco o el Manchester City. En el caso de los "ciudadanos", no estarían muy conformes con el nivel exhibido por Joe Hart, situación que se potencia con el conocimiento de Manuel Pellegrini, quien lo dirigió en la casa blanca.
Otro caso que es protagonista en este período es el de Wayne Rooney. El delantero tiene considerado dejar el Manchester United y el Chelsea sería el principal oferente.
Mourinho está interesado en que el artillero se integre al plantel, aunque no lo esperará por mucho tiempo. El DT de los "blues" le dio un ultimátum para definir su futuro: "De una forma un otra tiene que decir que quiere marcharse o que quiere quedarse".
El portugués le entregó 48 horas para que tome alguna determinación, ya que de lo contrario el equipo inglés iría a la carga de otro jugador en ataque, que podría ser Samuel Eto'o, recientemente desvinculado del Anzhi ruso.
Por ahora todo se mantiene en órbita de especulaciones a la espera de lo que será el 2 de septiembre, fecha en que se cierra el mercado de fichajes en Europa.