El fútbol de Hungría no es de los más importantes de Europa y la principal causa de esto es la falta de jugadores de calidad, los que prefieren actuar en países como Espala, Italia o Inglaterra.
Esto quedó de manifiesto en la victoria del pasado fin de semana del Ferencvaros, conjunto que se impuso por 4-2 al Siofok, en un encuentro de la máxima categoría magiar, donde se vio un fallo de proporciones.
Allí, el jugador del conjunto derrotado, Jusuf Dajic, se perdió un gol literalmente "debajo del arco", cuando el arquero ya estaba derrotado y en una situación donde claramente era más fácil convertir que errar.
Incluso, la posibilidad se le generó por una grave confusión entre el portero y un defensa del Ferencvaros, redondeando una jugada que no deja muy bien parado al fútbol húngaro.