El 1 de enero de 2017 la vida de Luciano Cabral cambió para siempre. El futbolista chileno, que se encontraba junto a su familia en Mendoza, se vio envuelto en una riña que culminó con un hombre fallecido.
El jugador, que en ese entonces pertenecía al Atlético Paranaense de Brasil, fue detenido junto a su padre acusados de la muerte de Joan Villegas.
Luego de poco más de dos meses en prisión, el futbolista nacionalizado chileno, podría conocer recién este lunes si su futuro estará en la cárcel de Mendoza o en las canchas del fútbol profesional. Es que 20 de marzo se presenta ante la Cámara de Apelaciones de Argentina, dónde se resolverá el panorama de Cabral.
"El tribunal, compuesto por los magistrados Ramón Pérez Pesce, Natalia Camiletti y Alejandro Raúl Celeste, será el encargado de decidir si el jugador de Argentinos Juniors recupera la libertad o si espera el debate en la cárcel", explica El Sol de Argentina.
Cabe recordar que el último club de Cabral hasta el suceso, Atlético Paranaense, se encuentra disputando la Copa Libertadores y comparte en Grupo 4 con Universidad Católica, Flamengo y San Lorenzo.