Barcelona se destaca por la capacidad de formación de jugadores, para que más tarde puedan brillar en el equipo estelar. Conocido es el caso de Lionel Messi, quien siendo sólo un niño fue reclutado por el club catalán.
Y esta vez el equipo pretendía volver a realizar un movimiento parecido, pero la FIFA intervino para impedirlo. El Barca seguía hace tiempo los pasos de Isak Vural, un joven de 12 años que es considerado la "perla sueca", a quien el club quería incorporar al Infantil B de la próxima temporada.
Vural destacaba en el Hammarby de Suecia cuando fue descubierto por Barcelona, y el pasado verano la familia del jugador se mudó a Sant Cugat e Barça, donde comenzó a jugar y a entrenar con los alevines del Barcelona. Según el diario catalán Sport, "todo estaba pensado para que la adaptación de Vural fuera más sencilla. De la generación del 2006, afrontaba su último año de fútbol siete antes de dar el salto al fútbol 11".
Sin embargo, "todo se truncó con la amenaza de una posible sanción de la FIFA. Vural ya tuvo problemas en el Sant Cugat y se le llegó a retirar la ficha. Por ello en el Barça tenían miedo que la FIFA les penalizara".
Esa amenaza de la FIFA fue aprovechada finalmente por el Benfica para llevárselo a Portugal, donde hoy comienza a brillar, aunque el Barcelona continúa siguiéndolo de cerca.