Sevilla iba ganando la ida de las semifinales de la Europa League ante la Fiorentina por 1-0, cuando Matías Fernández tuvo una clara oportunidad de igualar el pleito.
A los 18 minutos, el volante nacional recibió de frente al arco y en el área chica, pero, pese a que la posición era inmejorable, el marcador no se movió.
El mediocampista ejecutó con la derecha y la mandó fuera inexplicablemente, ante la incredulidad de sus propios compañeros y rivales.
Mira la jugada que pudo empatar la brega: