Dani Alves estuvo ocho temporadas en el Barcelona y se convirtió en un ídolo del elenco catalán. Si bien hoy se encuentra en México, sigue atento los pasos de su ex club, motivo por el cual decidió asistir al último clásico ante Real Madrid, aunque lo presenció desde un inesperado lugar.
Y es que el defensa brasileño llegó hasta el estadio Santiago Bernabéu y se ubicó en las gradas destinadas a los hinchas del elenco "merengue" para animar al Barca.
En la imagen se le puede ver muy sonriente entre los aficionados blancos mientras intenta pasar inadvertido con un gorro negro y lentes de sol.
Tras hacerse viral la foto, el propio futbolista la compartió en sus redes sociales junto a un divertido mensaje.
"Siempre hay que tener mucha personalidad para vivir cosas que uno nunca vivió. Viví el clásico hoy de una manera diferente, con sensaciones diferentes y con unas ganas tremendas de estar dentro", escribió junto a un emoji de risa.
"Qué mal rodeado estuve, pero aguanté como un campeón", añadió.
Además, envió un mensaje para los azulgranas: "Infelizmente para los culés no fue el resultado esperado, pero ser aficionado de un equipo es quererlo cuando las cosas no salen bien. Es apoyar cuando el día no está siendo bueno y nunca dejar de amarlo pase lo que pase!".