Real Madrid necesitaba los puntos para poder recortar distancias con el FC Barcelona, pero no lo consiguió. En su visita a la casa del Betis sólo aumentó los conflictos al interior de un camarín que, desde fuera, se ve disgregado.
Ni siquiera el empuje, garra o corazón, que apareció en los últimos minutos, fue suficiente para que los hombres de Florentino Pérez pudieran superar a un sólido cuadro local.
Beñat, en los albores del partido, marcó la única cifra del partido que marcó todo el trámite del juego.
Benzemá, Kaká, Modric y hasta el mismo Ronaldo no pudieron vencer la resistencia del golero Adrián y con esta derrota revalidar la Liga se ve cada vez más difícil.
Los ánimos en el Real Madrid no están buenos, no lo estarán y habrá que ver cómo Mourinho y compañía sacan lo mejor de un plantel que casi no se toleran.