Arsene Wenger, histórico entrenador del Arsenal, asumió hace tres meses como Director de Desarrollo Mundial del Fútbol de la FIFA, donde una de sus funciones es analizar posibles modificaciones a las reglas del juego, y en ese corto tiempo en su nuevo cargo ya da de qué hablar tras proponer un radical cambio.
Se trata de la regla del offside, la cual el francés propuso sea modificada para que un jugador quede habilitado si alguna parte de su cuerpo con la que pueda marcar un gol está en línea con el último defensor, sin importar si otra parte del cuerpo con la que pueda marcar esté más adelantada.
La idea de Wenger es evitar los polémicos goles anulados por centímetros, los cuales se han hecho más comunes desde la implementación del VAR.
“No estarás fuera de juego si alguna parte del cuerpo que puede marcar un gol está en línea con el último defensor, incluso si otras partes del cuerpo del atacante están al frente. Eso lo resolverá y ya no tendrás decisiones sobre milímetros y una fracción del atacante frente a la línea defensiva", señaló en declaraciones recogidas por el diario inglés The Sun.
Un ejemplo de un gol anulado que bajo la regla propuesta por Wenger sería convalidado, fue el que convirtió el delantero de Chelsea Olivier Giroud ante el Manchester United. En esa oportunidad el tanto no fue validado por el VAR porque, si bien el atacante galo estaba en línea con el último defensor, su pie derecho estaba un poco más adelante.
La propuesta de Wenger será presentada en la próxima reunión del organismo, programada para el próximo 29 de febrero en Irlanda.