La previa del derbi entre Real Madrid y Atlético de Madrid, válido por los cuartos de final de la Copa del Rey, estuvo marcada por una repudiable imagen: en uno de los puentes de la capital española, apareció un muñeco colgando con la camiseta de Vinicius Junior con una pancarta que decía "Madrid odia al Real".
El hecho fue condenado de manera transversal y centró las miradas hacia el delantero, quien fue aplaudido por el público del Estadio Santiago Bernabéu. El brasileño, titular indiscutido para Carlo Ancelotti, respondió con un golazo en la victoria 3-1 que le permitió a los blancos instalarse en las semifinales.
El atacante no habló con la prensa tras el compromiso, pero sí lo hizo en las redes sociales con un potente mensaje. "Vini ama Madrid. Hay uno solo", expresó.
El sudamericano, lamentablemente, ha sido foco de ataques y comentarios racistas en las últimas semanas que han tenido una tibia condena por parte de La Liga.