Es sabido que el fútbol argentino no pasa por una de sus mejores épocas, donde las figuras jóvenes que aparecen son cada vez menos, algo que siempre había sido una de sus principales virtudes.
Una de sus últimas "joyas" es Ángel Correa, un mediocampista ofensivo de solamente 18 años que juega en San Lorenzo de Almagro y que es una de las figuras del Torneo.
Sin embargo, el jugador trasandino ahora hizo noticia no por sus buenas actuaciones en el campo de juego, sino por suspicacias acerca de quiénes son los dueños de su pase.
Y es que según consigna el Diario Olé, un juez de Rosario ordenó investigar si es que el cartel de narcotraficantes "Los Monos" posee un porcentaje de la ficha de Correa.
Las sospechas están basadas en llamadas telefónicas grabadas entre los líderes comentando sobre actuaciones del jugador donde hacían referencia a él como su "pupilo", sumado a que tanto la agrupación como el jugador son oriundos del barrio "Las Flores".