En el fútbol se habla que, más allá de las reglas, existen "códigos" entre los jugadores.
Esto pareciera no haberse respetado en el partido que Independiente del Valle y Manta disputaban por al liga ecuatoriana, en especial en el último gol de la brega.
Independiente iba ganando por 3-0 y se jugaba el último minuto de juego, cuando Richard Porta se fue solo contra el portero rival.
Rápidamente lo dejó en el camino y se fue derecho hacia la línea, sin que siquiera lo persiguieran los defensores de Manta ante el inminente tanto.
Fue ahí cuando Porta se paró en la línea de gol, se dio vuelta y terminó convirtiendo el tanto de taco, en algo que muchos vieron como una definición de lujo y otros como un insulto al equipo rival.