Primera tarea cumplida.
El Barcelona del Tata Martino logró su primer objetivo y avanzó a los octavos de final de la Champions League.
Gracias a una buena jordana de Lionel Messi, quien no marcaba hace cuatro encuentros, el Barcelona superó por 3-1 al Milan.
Alexis Sánchez jugó los 90 minutos y fue una de las buenas figuras del elenco catalán, aunque no todo fue alegría: fue amonestado, por lo que se perderá el próximo duelo.
En el primer tiempo, el Barcelona dominó de principio a fin y casi no permitió llegadas del elenco italiano.
Sólo a los 29 minutos un penal inexistente sobre Neymar permitió a Lionel Messi anotar de penal y poner fin a su mala racha de cuatro encuentros sin marcar.
Diez minutos más tarde el partido se hizo aún más claro para el elenco local cuando Sergio Busquets se las ingenió para marcar el segundo.
A los 38 minutos, un buen tiro libre de Xavi Hernández encontró en el área chica al volante catalán quien de cabeza puso el segundo.
Cuando parecía que el Barcelona se iría sin inconvenientes al descanso, un autogol de Piqué inquietó todo.
Kaká, sobre el final de la primera parte, desbordó hasta la línea de fondo. Al quedarse sin ángulo, sacó un centro atrás que desvió el espigado zaguero.
En el complemento el partido se tornó muy interesante principalmente por el ingreso del siempre punzante Mario Balotelli.
Si bien estuvo cerca de marcar, Víctor Valdés y la última línea del Barcelona estuvo a la altura para evitar la caída de su arco.
Ya cuando el partido expiraba, Lionel Messi anotó la joya de la noche. En perfecta combinación con Cesc Fábregas, Messi dejó atrás a su marcador y definió perfecto ante la salida de Abbiatti.
Otra gran jornada de Lionel Messi en la Champions League que con estos dos tantos quedó a sólo seis tantos del máximo goleador en este certamen: el madridista Raúl González Blanco.