"Estoy aquí para contarlo. Dios me dio una segunda mitad del partido". Así Lucio, recordado defensa brasileño que militó en equipos como Inter de Milán y Bayern Munich, comenzó su relato sobre el accidente doméstico que sufrió recientemente y que lo mantuvo 20 días internado.
"Ocurrió de repente, mientras cenaba en casa de un amigo, poco después de celebrar mi 47º cumpleaños el 8 de mayo. En un momento dado, la chimenea se apagó y, por desgracia, un amigo, intentando reavivar el fuego, le echó una lata de alcohol encima, y fue entonces cuando se produjo la explosión", relató en diálogo con La Gazzetta dello Sport.
"Solo recuerdo las llamas en la cara, los brazos y las piernas (...) recuerdo bien lo difícil que fue dormir por el dolor. Nunca había pasado tanto tiempo en el hospital. Las operaciones fueron necesarias para extraer tejido y vendajes específicos", agregó el ex defensor que terminó con el 18% de su cuerpo quemado.
Lucio sostiene que la hospitalización "fue un verdadero trauma", argumentando que las lesiones por quemaduras son difíciles de tratar "tanto física como sicológicamente".
"Me llevará tiempo superar el impacto, sobre todo mental. Sigo con el tratamiento de la piel, que lleva mucho tiempo, pero estoy mejorando", concluyó.