Cuando Sergio Ramos caminó desde la mitad de la cancha hacia el punto penal, la imagen que ningún español quería recordar apareció rauda en la mente de todos. El defensor del Real Madrid, en el último penal que lanzó con los merengues, se transformó en el blanco de todas las burlas al elevar su disparo en la definición ante el Bayern Munich en las semifinales de la Champions League.
También en semifinales, pero de la Eurocopa, Sergio Ramos tuvo la responsabilidad de anotar en la definición ante Portugal. Cuando corrió para pegarle al balón, el defensor sorprendió a todos con un ya clásico remate "picado". Su acción dio mucho que hablar, pero el central/lateral sacó la voz para defenderse.
"El penalti era un tema personal, de estado anímico y confianza, pero no por demostrar nada a nadie. Se dijeron muchas cosas cuando fallé ante el Bayern que como profesional me tocaron el orgullo, pero tengo claro que lo que me ha llevado hasta aquí es mi forma de pensar y de levantarme", comenzó.
"Lo del penalti al final es una anécdota y no debemos quedarnos con ello, sino con el pase a la final, aunque con el tiempo sí que será algo que recordaré", continuó en una entrevista con Marca.
En relación a la final de este domingo ante la Italia de Mario Balotelli, aseguró que "nos debemos de preocupar pero no obsesionarnos. Debemos mantener nuestra filosofía de juego, que es la clave de nuestro éxito".