Todo el mundo vio lo mismo. Menos Sao Paulo.
Mientras todos ven que lo que pasó ayer miércoles por la noche en el estadio Morumbí fue una vergüenza bajo todo punto de vista, el actual campeón de la Copa Sudamericana lo ve como algo "gracioso".
Eso se puede entender después de las declaraciones del presidente de Sao Paulo quien ironizó ante la no presentación de Tigre con que ayer hubo "una fuga de argentinos, un hecho para festejar".
"Los de Tigre estaban cansados, con 67 mil personas en las tribunas. En el segundo tiempo iban a ser goleados, iban a quedar mal. Resolvieron irse. Nosotros vamos a tener un doble festejo: la fuga de los argentinos y nuestra victoria mayúscula", aseguró entretenido Juvenal Juvencio.
Por si fuera poco, el mandamás del equipo paulista negó tajantemente que la fuerza policial y del club haya realizado algún tipo de agresión o intimidación al elenco rival.
"No hubo nada de eso, ellos jugaron sucio en el partido de ida, pegaron mucho, aquí invadieron el campo para el calentamiento. Ellos juegan a la provocación. Jugando al fútbol, no pueden con nosotros", agregó.
Ante la atenta mirada de la prensa internacional y del mundo del fútbol, que ve con preocupación este acontecimiento de cara al próximo Mundial de Brasil 2014, el presidente de de Sao Paulo arremete con ironía. Preocupante.