La primera derrota del Barcelona esta temporada en Liga debería servir para recordar que el equipo no es invencible, dijo su entrenador Tito Vilanova después de la sorprendente derrota por 3-2 el sábado frente a la Real Sociedad.
El inicio récord de esta campaña, cuando los azulgrana ganaron 18 de 19 partidos 19 y tan sólo dejaron escapar dos puntos por el empate 2-2 cosechado ante el Real Madrid, hizo que muchos expertos ya les proclamaran campeones de Liga.
Los catalanes todavía mantienen una ventaja de 11 puntos sobre el segundo clasificado, el Atlético de Madrid, y de 18 sobre el actual campeón, el Real Madrid, antes de que ambos jueguen sus respectivos partidos en la jornada el domingo. Sin embargo, las primeras dudas han surgido esta semana en el Camp Nou.
El miércoles, empataron en casa 2-2 frente al Málaga en el partido de ida de los cuartos de final de la Copa del Rey, concediendo las tablas en el último minuto y pese a que los andaluces jugaban con un hombre menos.
El viernes, el Barça se quedó de piedra con la noticia de que su portero Víctor Valdés había rechazado las negociaciones para renovar su contrato y dejaría el club azulgrana cuando venza su actual contrato en 2014.
La derrota en San Sebastián supone la primera vez de la temporada que el Barça no ha conseguido ganar en dos partidos consecutivos desde que Vilanova se hiciera cargo del banquillo, pero el que fuera asistente de Pep Guardiola restó importancia al resultado.
"Algún día teníamos que perder en la Liga", dijo en la rueda de prensa posterior al partido.
"Todavía queda mucha Liga. Aunque todo el mundo crea que hemos ganando partidos fácilmente, no es así. Todavía nos quedan muchos partidos difíciles por delante".
EL MÁLAGA, EL SIGUIENTE
El próximo jueves el Barcelona volverá a enfrentarse en la vuelta de la Copa del Rey al Málaga, que también se clasificó para octavos de la Liga de Campeones, y su capitán, Carles Puyol, hizo un llamamiento a la calma.
"No hay necesidad de dejarse llevar por una derrota", dijo a los periodistas el defensa español. "Tenemos que ir a Málaga y ganar. Creo que hemos jugado bien".
El Barça, que logró una ventaja de 2-0 el sábado, estrelló dos balones contra el palo y tuvo oportunidades para asegurarse la victoria en la primera parte pero el partido cambió tras la expulsión de su defensa Gerard Piqué al comienzo de la segunda mitad.
El Barça no ha ganado en Anoeta en sus tres últimas visitas pero Montanier, técnico de los donostiarras, que ha luchado por convencer a los locales desde su fichaje en 2011, no se dejó llevar por su triunfo.
"Los jugadores nunca se vinieron abajo", dijo. "Sabíamos que íbamos a sufrir pero los jugadores fueron fuertes mentalmente".
"El Barça es un equipo fantástico, incluso con diez hombres. Podría jugar todo el campeonato con uno menos".
"No hay receta para vencer al Barça. Ganamos por tener un equipo compacto, trabajador y con una pizca de suerte".