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Doce pastillas y todo desinfectado: La nueva vida de Lizardo Garrido después del trasplante

El ex defensa de Colo Colo recibió una nueva médula ósea, donde la donante fue su hija. "Hoy ella me permite vivir", dijo.

24horas.cl

Jueves 28 de julio de 2022

En mayo pasado un duro golpe remeció el mundo de Lizardo Garrido y su familia. El ídolo de Colo Colo debió ser internado de urgencia y fue diagnosticado de leucemia. Desde ahí comenzó una dura batalla contra la enfermedad, que lo tuvo varios meses hospitalizado y donde incluso fue trasplantado. Ahora fue dado de alta, pero continúa la lucha en su nueva vida.

"Me dieron de alta, pero dijeron que tenía que cuidarme mucho e ir dos veces a la semana a sacarme sangre y una al médico. Ven cómo funciona mi médula. Si se alteró algún examen, lo arreglan. Debí salir antes de la clínica, pero apareció fiebre y colitis antes de venirme. Hoy estoy con todos los exámenes buenos, la médula que me entregó mi hija ya está funcionando bien", explicó el "Chano" a LUN.

Y es que su hija María José, compatible en un 60% con él, fue quien le donó la médula ósea que necesitaba para combatir la enfermedad. "Como es la vida: yo le di vida a María José con su mamá y hoy ella me permite vivir. Ella me mandó ese mensaje cuando me dieron de alta. 'Qué bueno que le pude dar salud y vida a mi papá'. La vida me dio otra posibilidad", reveló.

Sin embargo, su nueva vida también viene acompañada de un fuerte cuidado y reglas que seguir para continuar dando la batalla.

"Me resetearon, comencé de nuevo, incluso los doctores me dicen que debo ponerme las vacunas de niño", contó.

Entre los cuidados, el ex central albo detalló que "puedo comer de todo, aunque nada de carne ni pescados crudos y todo lo demás tiene que ser súper desinfectado. Debo evitar cualquier cosa que me vaya a causar daño al cuerpo".

Pero no sólo eso. Además, debe tomar religiosamente sus medicamentos, los cuales suman doce pastillas en total. "Llevo acá (un cuaderno) sus horarios desdela mañana, de las doce pastillas que debe tomar", indicó Vilma, su novia desde hace dos años y quien en la actualidad cuida de él.

El cambio físico también fue importante tras la hospitalización y los agresivos tratamientos. Perdió 10 kilos y su clásica cabellera larga debido a la quimioterapia. "Ha sido terrible ese tema, pero en dos meses más me crece", dijo.