El pasado martes el Chelsea rescató un valioso empate 1-1 desde España ante el Real Madrid, quedando en muy buena posición para clasificar a la gran final de la UEFA Champions League. Y el gol de los ingleses en aquel compromiso fue obra del estadounidense Christian Pulisic, uno de los nombres destacados de los 'blues' en la presente temporada.
Pero la historia del 'Captain America' pudo ser muy diferente, ya que en sus inicios estuvo cerca de llegar a probar suerte a Sudamérica, donde Universidad Católica aparecía entre sus posibles destinos.
En conversación con La Tercera, el chileno Jorge Alvial, descubridor de Pulisic en Norteamérica cuando apenas tenía 13 años, reconoció que pensó que podía recalar en los cruzados en caso que su periplo por Europa no fuese exitoso. Y estuvo muy cerca de ocurrir.
La historia de Alvial (que en sus descubrimientos también se apunta el de Alphonso Davies, lateral canadiense del Bayern Münich) con Pulisic inicia de una vieja amistad con el padre del jugador.
Ahí, el nacional le consiguió una prueba en el Chelsea, club en el que trabajaba, pero donde finalmente no quedó.
"Fue impresionante. De ahí mismo, de la cancha, llamé a mi jefe en Chelsea que era Frank Anderson y le dije ‘estoy llevando un chico americano para prueba’. Me contestó: ‘¿Un chico americano, de adonde?’… Pero lo convencí y lo llevé. Estuvo casi tres semanas en Londres, yo lo acompañé, y su papá también estuvo ahí. Al final Chelsea decide no dejarlo por muchas cosas, yo creo que principalmente porque no tenía pasaporte europeo", contó.
Ahí, ya con pocas chances de iniciar su periplo en el Viejo Continente la idea era clara: traerlo a probar suerte en Sudamérica, donde Universidad Católica era uno de sus posibles destinos.
“Después de lo de Chelsea se fue a Villarreal y tampoco quedó. Ahí yo no fui, porque estaba trabajando. Luego de eso se fue al PSV Eindhoven de Holanda, a otra prueba que, de alguna manera, también se la manejé yo. Justo ahí había una persona del Borussia Dortmund que estaba viendo a los chicos y le encantó este americano. El papá me llamó y yo le dije que era una excelente idea que se fuera para allá. Porque la próxima parada, si no quedaba en PSV, yo lo iba a traer a probarse a Universidad Católica y a River Plate de Argentina”, señaló.
Sobre si realmente estuvo cerca de intentar llegar a Chile, su descubridor es claro: “Si usted me pregunta si pudo llegar a la UC, claro que pudo estar. Yo ya había hablado con el papá y me dijo que probáramos todos los equipos en Europa que podamos”.
“Yo lo ayudé de amigo, sinceramente, porque ya no había quedado en Chelsea. Ocupé las conexiones que tenía. Fue algo muy rápido, no recuerdo si alcancé a llamar a alguien de la Católica, pero ya habíamos decidido con el padre que si no quedaba en PSV nos veníamos a Sudamérica. Pero apareció el Dortmund, se fueron con el papá a Alemania y allá empezó a crecer como jugador. Yo siempre sigo en contacto con ellos. Después, cuando comenzó a destacar fue llamado a la Sub 15 de Estados Unidos y así hasta el resto de las categorías de esa selección”, agregó.
Así, la historia del jugador que gracias a su gol ante el Real Madrid dejó al Chelsea a las puertas de una final de Champions, pudo ser muy distinta en caso que hubiese llegado a San Carlos de Apoquindo.