Un bochornoso final tuvo el partido que animaron Universidad de Chile y Curicó Unido (1-2), luego de que un gran número de barristas azules ingresara a la cancha para encarar a los jugadores.
Luego de unos minutos donde los fanáticos alcanzaron a agredir a algunos futbolistas, la fuerza policial logró disuadir a los hinchas y evitar que los hechos pasaran a mayores.
Con el paso de las horas, comenzaron a surgir más imágenes de lo ocurrido destacando la agresión que sufrió Pablo Aránguiz y la reacción que tuvo el volante, quien tuvo que ser retenido por otras personas para evitar un mayor conflicto.
Otra de las imágenes más llamativas de la bochornosa jornada, fue sin duda la de un hincha de Universidad de Chile que ingresó a la cancha junto con su pequeño hijo, sin considerar el riesgo que podía tener.