Ni el título albo ni el posterior festejo se salvaron de la polémica. El cuadro popular fue el justo campeón del Apertura, pero la batalla campal que desató su hinchada junto a la de Santiago Wanderers en el mismísimo campo de juego empañó toda la celebración, que fue cuestionada tras los incidentes.
Y es que el plantel de Colo – Colo, luego de haber vivido en carne propia la trifulca entre las barras bravas y tras enterarse de la derrota de la UC, decidió festejar el título en camarines y posteriormente en el campo de juego. Situación quecausó molestia y de la que Justo Villar se refirió en conferencia de prensa.
El meta albo reconoció que “Tratamos de ser moderados en los festejos, pero igual hubo excesos. Eso es difícil de manejar y 500 desadaptados nos privaron de festejar”.
También tuvo palabras para referirse al sentir del equipo cuando presenciaron directamente los incidentes en la cancha del Elías Figueroa. "Sentimos miedo, pero más que eso, frustración. Pensábamos que habría garantías, por eso llevamos a nuestras familias” reportó La Tercera.
Pese a los cuestionamientos, el portero aclaró que la celebración se debió a las ganas de levantar la copa. Situación que consideró completamente válida.