El Tercer Tribunal Oral en lo Penal determinó este jueves recalificar el delito de Johnny Herrera a cuasidelito de homicidio.
El examen de sangre del portero de la Universidad de Chile no determinó manejo en estado de ebriedad, por lo que la pena máxima que arriesga no implicaría cárcel.
Esta situación se da porque existen dudas respecto a la proyección de la alcoholemia.
La jueza Blanca Rojas dictaminó que este viernes, a partir de las 11.00 horas, se le dará la posibilidad a Herrera de que declare por última vez, tras lo cual se dictará el veredicto.
Durante esta jornada, en el último día de audiencia, las partes presentaron los alegatos concluyentes.
La fiscalía profundizó en las discordancias existentes en los horarios y cuestionó —a raíz de la comparación— los antecedentes presentado por los testigos de la defensa.
Por su parte, el abogado querellante, en representación de la familia de Macarena Casassus, enfocó sus alegatos en el estado de ebriedad de Herrera y la falta a "la conducta apegada a la norma" del tránsito, luego que el portero de la Universidad de Chile condujera a exceso de velocidad.
"Claramente el alcohol es la causa de la muerte de Macarena, si no Herrera pudo haberla esquivado", afirmó.
La defensa de Herrera apeló, por su parte, a seis puntos relevantes para acreditar a la inocencia del guardameta. Entre estas destaca la validez de la muestra del alcotest, la muestra de alcohol en la sangre y acusa incongruencias en argumentación en la causa basal.
REVISA LAS PRINCIPALES DECLARACIONES QUE MARCARON EL JUICIO