La victoria del conjunto estadounidense frente a Francia extendió a 41 partidos su racha triunfal en Juegos Olímpicos que comenzó con su medalla de bronce en Barcelona 1992.
Luego de un primer cuarto relativamente parejo, Estados Unidos empezó a marcar diferencias y sacó 12 puntos de ventaja en el segundo y 26 en el tercero, cuando el partido ya estaba prácticamente definido.
Por si hacía falta, el combinado norteamericano ganó el cuarto período por 23-13 para aumentar todavía más la diferencia.
En una sólida actuación de equipo frente a la poca resistencia presentada por Francia, Candace Parker se destacó entre las flamantes campeonas con 21 puntos.
Más temprano, Australia extendió a cinco medallas consecutivas su racha ganadora en el baloncesto olímpico femenino al superar a Rusia 83-74 para obtener la presea de bronce.
Australia, que conquistó medallas plateadas en los últimos tres Juegos Olímpicos y un bronce en Atlanta 1996, subió el ritmo en el segundo cuarto para lograr una ventaja de ocho puntos antes del descanso. El equipo de Oceanía aumentó esa brecha a 17 en el tercer período.
Rusia descontó y se puso a cinco puntos a falta de 80 segundos para el final, pero Australia defendió con solidez y se aseguró la medalla.
La capitana Lauren Jackson lideró al conjunto australiano con 25 puntos y 11 rebotes, mientras que la base Kristi Harrower aportó 21 unidades.
Becky Hammon fue la máxima goleadora de Rusia con 19 puntos.
Fuente: Reuters