Satisfacción y emoción. Así se podrían resumir las sensaciones con la que la terminó Tomás González tras su debut olímpico en Londres 2012, donde brilló tanto en la especialidad de salto con trampolín y suelo.
Tras la competencia, el chileno comenzó analizando su actuación en salto: "El primer salto fue buenísimo, mi mejor marca. En el segundo tuve un pequeño error”.
Sin embargo, a continuación no dudó en manifestar su alegría: “estoy contento por lo hecho, cumplí con todos los objetivos que tenía propuestos”.
A continuación, agregó: “Tengo las chances de estar en la final en ambas categorías, suelo y salto, pero ahora hay que esperar... a cruzar los dedos”.
Finalmente, González hizo hincapié en lo importante que es para el apoyo de su familia.
"Están mi mamá y mis hermanos. Estoy contento que hayan podido disfrutar de una competencia mía, estoy muy emocionado y feliz además por el cariño recibido desde Chile", terminó asegurando.