El golfista estadounidense Scottie Scheffler, número uno del mundo, fue detenido por la Policía de Louisville (Kentucky, EE.UU.) este viernes y luego dejado en libertad.
El deportista, quien intentaba ingresar al Valhalla Golf Club para disputar la segunda ronda del Campeonato PGA Championship, ha dicho que todo fue un "malentendido". Sin embargo, está acusado de agresión en segundo grado a un agente de policía, conducta criminal en tercer grado, conducción imprudente y de ignorar las señales de tránsito de un oficial que dirige el tráfico.
El incidente ocurrió cuando Scheffler trató de esquivar un retén policial para acceder al campo de golf sobre las 06:00 horas (horario local) según informó la cadena ESPN, que estuvo presente en la escena.
Un uniformado le habría indicado que se detuviera, pero el golfista habría seguido algunos metros hasta que un agente logró que se detuviera agarrándose al lateral del vehículo. El agente tuvo que recibir atención médica en un hospital por dolor, hinchazón y abrasiones en la muñeca y rodilla izquierdas, según la Policía.
"El sujeto se negó a obedecer y aceleró hacia adelante, arrastrando al detective Gillis al suelo", apunta el informe policial.
Tras ser trasladado a la cárcel y que le hicieran la tradicional fotografía policial con uniforme naranja, Scheffler fue dejado en libertad y llegó a tiempo para participar en la segunda ronda del Campeonato, el segundo 'Major' de la temporada.
"Era una situación muy caótica, comprensible debido al trágico accidente que había ocurrido anteriormente, y hubo un gran malentendido sobre lo que pensé que se me estaba pidiendo que hiciera. Nunca tuve la intención de ignorar ninguna de las indicaciones", apuntó Scheffler en un comunicado. El golfista de 27 años tendrá que comparecer el martes por la mañana ante un juez.