Tiene 25 años y sueña con llegar a los Juegos Olímpicos. Gaspar Riveros quiere dejar de ser el "hermano de Bárbara" y brillar con luces propias. Sin embargo, el camino para convertirse en un triatleta de elite no es fácil y requiere de mucho esfuerzo, concentración y compromiso.
Por eso, en conversación con 24Horas.cl durante sus semanas de vacaciones en Chile, Riveros reveló cómo es su rutina de entrenamiento, el poco descanso que tiene, los viajes y sus sueños, donde destaca la cita olímpica de Río de Janeiro en 2016.
"Entreno los siete días de la semana", partió diciendo respecto a su rutina. Y es que son muy pocos los días de descanso que tiene durante el año.
"Me tomo tres semanas de vacaciones en esta época del año (noviembre) y una semana en mayo", contó.
El resto del año es puro entrenamiento, con sólo un día libre cada 15 o 20.
"Cada 15 días intento descansar uno o cada 20 días descanso uno", señaló.
En cuanto a sus rutinas, Riveros dijo que "generalmente son entre 5 y 6 horas diarias con tres sesiones: una en la mañana, una al mediodía y otra por la tarde. La primera sesión es a las 07:00 de la mañana, después de dos horas, que generalmente es nado, al mediodía ando en bicicleta y en la tarde o se repite o se hacen los tres deportes, poniendo énfasis en bicicleta".
"Se nada seis días a la semana, de lunes a sábado, se anda en 'bici' 5 días a la semana y corro casi todos los días porque es mi punto más débil y debo mejorar mucho", agregó.
"Pesas es un entrenamiento extra, no dentro de una de las tres sesiones", añadió.
"Los días más tranquilos son los domingos porque sólo hago trote durante una hora y media en la mañana, y el día miércoles que hago sólo dos entrenamientos, nado y trote suave", complementó.
Pero además de sus prácticas diarias, el deportista nacional debe dividir su vida entre Chile y Canadá. Su entrenador canadiense, Craig Taylor, pasa la mitad del año con él en tierras norteamericanas guiándolo, mientras que la otra mitad la pasa en Chile entrenando en el estadio Italiano.
"Entreno la mitad del año en Canadá, cuando acá estamos en invierno, y la otra mitad en Chile. Mi entrenador es canadiense y acá Eduardo Cossio supervisa mi natación en el estadio italiano, mientras que bicicleta y trote lo veo por mi cuenta con los planes que me envía mi entrenador desde Canadá", explicó.
El presente, futuro y los Juegos Olímpicos
El 2015 no ha sido su año. Buscaba con ansias conseguir buenos resultados que lo llevaran a los Juegos Olímpicos de Río 2016, pero las lesiones de Tendón de Aquiles y músculo sóleo lo alejaron de sus metas.
El Buenos Aires Triathlon ITU American Cup Final que se disputó el 15 de noviembre pasado era su gran regreso, pero un resfrío le jugó en contra.
"He tenido un año muy malo, muchas lesiones y pocos resultados. En Buenos Aires llegué enfermo y fue la guinda de la torta del mal año (terminó en el 12° lugar con un registro de 02:05:59)", dijo.
De hecho, su negro 2015 lo hizo incluso plantearse la idea del retiro. "Algunas veces. Sobre todo cuando no se dan los resultados, así que este año me lo planteé mucho", reveló.
Y es que su gran ambición, los Juegos Olímpicos, se ven cada vez más lejanos: "Este año era muy importante para conseguir una clasificación. Ahora las posibilidades son muy difíciles y soy realista".
"Partí el año casi 100 y terminé casi 200 por los malos resultados (debe entrar en el top 60 antes de mayo para clasificar a Río 2016)", agregó.
Pero no se rinde. Ya está enfocado en 2016 y las competiciones que enfrentará, siempre con la esperanza de conseguir los resultados necesarios para llegar a los juegos.
"Voy a partir en febrero con algunas copas continentales y mundiales, y de ahí dependiendo como voy, seguir intentando con Río, sino a estar tranquilo y competir por mi club".