Quizás, esta era la carrera más importante para Usain Bolt.
El atleta jamaiquino, quien en la final de los 100 metros planos del Mundial de Daegu disputado en 2011 sufrió una partida falsa y fue descalificado, obtuvo este domingo su merecida revancha.
El hombre más rápido de la historia, se colgó la medalla de oro en la final de la prueba reina del atletismo con un tiempo de 9.77 y volvió a revalidar, una vez más, la figura de rey indiscutido de la velocidad.
En las pruebas clasificatorias, Bolt no tuvo mayores inconvenientes para asegurar su paso a las semifinales.
En dicha instancia, se vio muy lento e incluso hasta avanzada la carrera no tenía asegurado el primer puesto, aunque sobre el final, pudo retomar el rumbo y quedarse con la serie.
Desde la pista 6 largó Usain Bolt quien se volvió a ver muy lento en el arranque. Es más, parecía que se le escaparía el primer puesto, pero sobre el final (cerco de los 70 metros) sacó todo su potencial y se quedó con la carrera.
Así, el hombre más rápido del mundo se colgó la medalla de oro en los 100 metros planos en el Mundial de Atletismo de Moscú. Sigue siendo el rey.