El éxito de Tomás González es fruto de su trabajo, dedicación y esfuerzo. Sin embargo, su increíble nivel viene acompañado por la labor que ha realizado el cubano Yoel Gutiérrez.
Su técnico ha llevado a su dirigido a lo más alto de la gimnasia no sólo a nivel nacional sino que mundial: sólo hay que recordar cómo rozó la gloria en las finales de suelo y salto en los Juegos Olímpicos.
Pese a esto, el técnico cubano tiene una espina clava: sus dardos apuntan a la Federación de Gimnasia.
El estamento le prohibió tomar la dirección de la selección nacional de gimnasia. Debido a esto, aseguró que la federación "es un cáncer interminable".
En declaraciones con la edición impresa del diario El Mercurio, Gutiérrez se preguntó: "¿Cómo se entiende que a quien ha llevado a dos cuartos lugares a un gimnasta chileno lo van a basurear con nuevas contrataciones de técnicos españoles y colombianos?", comentó.
"Jamás pensé que por trabajar con un deportista para conseguir grandes logros, la consecuencia acá sea sentirse abandonado", relató con cierta ironía.
Todos estos problemas comienzan a quedar atrás. Pese a que duele, Yoel Gutiérrez ya delinea el futuro de su pupilo, cuyo próximo desafío serán los Odesur.