Crece la inquietud de las autoridades brasileñas.
Aún no consiguen detener los los focos de violencia en sus principales ciudades a 50 días del inicio del Mundial de Fútbol.
La madrugada de este miércoles, disturbios que se iniciaron en una favela de Río de Janeiro se trasladaron hasta Copacabana, poniendo en tela de juicio la seguridad de cara al evento deportivo.
Las protestas eran por la muerte de un conocido bailarín de televisión. Su cuerpo fue encontrado horas antes con claros signos de tortura tras un operativo policial contra el narcotráfico.
En los últimos ocho años, cerca de 6.000 personas han muerto por causas de intervención de uniformados en las favelas.
Foto: Reuters