Ya se sabía, cuando saltaba a la cancha de Mendoza, que Argentina estaba fuera del Sudamericano. Papelón histórico, decían los medios locales, para el elenco albiceleste, que ejercía como anfitrión en el torneo. Se había creado ilusión con la presencia de los "4 magníficos", pero Argentina ni siquiera tuvo opción de pelar en la cancha en la última fecha por clasificar.
Decepción tras decepción, el elenco de Marcelo Trobbianni dependía en esta última jornada de Paraguay, que no falló ante Bolivia y despidió de golpe a ambos elencos.
Pese a todo el partido debió jugarse. Y parece que sin presión, la albiceleste si existe. No había nada en juego, pero el partido tuvo la emoción y la garra que le faltó al cuadro trasandino en anteriores fechas.
Argentina pegó primero, desde los 12 metros. Alan Ruiz transformó de manera impecable a los 12 minutos de juego. Pero lo mejor se lo guardaban ambos para el segundo acto. En la reanudación apareció primero una de las figuras del equipo albiceleste, Iturbe, para cabecear el segundo en el 46.
Despertó entonces Colombia, que buscaba amarrar la segunda plaza del grupo. Descontó Perea también con la testa, minutos después. En el minunto 70 Allione fusiló al arquero cafetero, Hurtado, de fuerte disparo cruzado desde la izquierda. Pero de nuevo minimizó la distancia Quintero, con un gran disparo de tiro libre desde 38 metros, con la zurda, imitando a Cristiano Ronaldo, que dobló las manos del meta argentino, Mehring.
Los medios argentinos hablan de un cambio de orden. Ya no vale con el nombre, no basta con ser local. Argentina salió a pasearse, y el paseo fue corto. La albiceleste no salía en primera fase de un Sudamericano sub 20, desde 1985. 13 torneos después, se despide, y por ende, del Mundial de Turquía.